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Llamadas Oportunas

La Única Paz de Mente

Vol. 1                                                                           N0. 51, 52

¿ES LA RELIGIÓN ALGO QUE VIVE Y CRECE? ¿O ES ALGO QUE MUERE

Y QUE DECAE?

 

CINCO HOMBRES QUE MATAN DESPUÉS QUE OTRO PONE UNA SEÑAL
 

 

MEDITACIÓN PARA LA ORACIÓN DE APERTURA

No tome ningún pensamiento para el siguiente día

 

Daré lectura de “Palabras de Vida del Gran Maestro”, comenzando en la    página 9 –

 

“Cristo trató de quitar aquello que oscurecía la verdad … Sus palabras presentaban a través de un nuevo prisma las enseñanzas de la naturaleza, así como las de la Biblia, y las convertían en una nueva revelación … expresó la lección: 'Reparad los lirios del campo, cómo crecen [con la simplicidad de la belleza natural]; no trabajan ni hilan; mas os digo, que ni aún Salomón con toda su gloria fue vestido así como uno de ellos'. Entonces siguió la dulce seguridad y la importante lección: 'Y si la hierba del campo que hoy es, y mañana es echada en el horno, Dios la viste así, ¿no hará mucho más a vosotros, hombres de poca fe?' En el Sermón de la Montaña estas palabras … Fueron dirigidas a la multitud, en la cual se hallaban hombres y mujeres llenos de congojas y perplejidades, apenados por las desilusiones y el dolor. Jesús continuó: 'No os congojéis, pues, diciendo: ¿Qué comeremos, o qué beberemos, o con qué nos cubriremos? Porque los gentiles buscan todas estas cosas: que vuestro Padre celestial sabe que de todas estas cosas habéis menester'.… ”

 

Ahora oraremos para que como siervos de Cristo hagamos todo para que podamos remover lo que oscurece la verdad de hoy; encontremos luz a través de la naturaleza y la Biblia; que nos demos cuenta que el Señor cuida de nosotros, más de lo que cuida los lirios, que aprendamos a confiar en El y hacer su voluntad y no ser más semejante a los gentiles quienes se angustian por las cosas de este mundo, que nosotros sabemos que El verá que tenemos todas nuestras necesidades, si nuestro primer negocio es el avance de su reino.

 

Copyright, 1953

Todos los derechos reservados

V.T. HOUTEFF

 

Vol. 1, N° 51                                                                                                                                                                                              2


 

¿ES LA RELIGIÓN ALGO QUE VIVE Y CRECE?

¿O ES ALGO QUE MUERE Y QUE DECAE?

 

TEXTO DE LA ALOCUCIÓN POR V. T. HOUTEFF

MINISTRO DE LOS DAVIDIANOS ADVENTISTAS DEL SÉPTIMO DÍA

EL SÁBADO, 26 DE JULIO DE 1947

CAPILLA DEL MONTE CARMELO

WACO, TEXAS

 

¿Es la religión algo que crece y progresa o es algo que permanece estancada? Justamente el otro día oímos por radio a cierto ministro que presumía que su denominación no había añadido ni quitado una doctrina desde que había sido organizada. Pero ¿es esto algo de qué se debe presumir? O ¿es algo qué se debe lamentar? Esta es una pregunta a la que debemos dar la debida respuesta.

 

Si el mundo no permanece estancado, si puede progresar como lo hace, entonces ¿por qué la iglesia debiera permanecer estancada? ¿por qué la iglesia no sabe hoy  más de Dios y más de la Biblia hoy que lo que supo ayer? ¿por qué la cristiandad es orgullosa por no añadir doctrinas bíblicas? ¡Que sería del mundo si cada cosa no avanzara!

 

Si tuviéramos que comparar el aumento del conocimiento del mundo y sus adquisiciones en los últimos 50 o 100 años con el aumento de conocimientos de la iglesia y sus adquisiciones en el mismo período de tiempo, tal vez podríamos ver que esto no guarda comparación.

 

Mirad el progreso que el mundo ha hecho, y mirad la estupidez que la iglesia está cultivando. Si, digo cultivando, porque parece que más bien que estar

 

 

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lamentando el hecho de no haber añadido o quitado doctrina, y más bien que estimular a la gente para que esté en espera de la visitación de Dios, ellos están haciendo negocio en impedir a los laicos de venir en contacto con los mensajeros de Dios y su progresiva verdad. Con el alimento a su tiempo con los mensajes de Dios para hoy. Nada que no se origine en sus propias convenciones, a los laicos se les dice que no tienen nada que hacer con esto. Esto simplemente lo hacen porque ellos mismos no aceptan las verdades enviadas de Dios; y porque si alguno de su congregación, viene en contacto con ésta y la acepta, ellos naturalmente tendrán que unirse a la verdad, donde la verdad está. Así que su primer negocio es mantener a los laicos en oscuridad y en temor de que alguien los engaña, si se exponen así mismos a cualquier cosa que sus ministros no aprueban.

 

Tal esfuerzo por supuesto puede impedir por años el progreso, pero nunca tendrán éxito, no más éxito que el que tuvieron los oponentes de Galileo en hacer plana la tierra, compeliéndole a retractarse de su posición de que la tierra es redonda. Y no más que Roma triunfó en contra de la reforma protestante, o los sacerdotes y rabinos en contra de la cristiandad. Por lo tanto este es el tiempo para darnos cuenta de que el pueblo debe ser mantenido en ignorancia de cualquier cosa a fin de mantenerse leal a la iglesia, ciertamente no son dignos; y que la única manera de tenerlos a ellos realmente leales y firmemente establecidos en la verdad y salvarlos en el reino es enseñarles la verdad y entonces darle libertad para escoger lo que ellos mismos puedan personalmente saber que es verdad y que es error. Para mantenerles en oscuridad de lo que los engañadores enseñan (si es que son engañadores), los mantienen en ignorancia aún de lo que está en el cielo. Esto para siempre cierra la línea de comunicación para el cielo, y hace del pueblo inválidos espirituales y autómatas. El pueblo debe conocer por si mismo que es la verdad y ellos mismos deben decidir que hacer con ella, cuando le sea concedida su

 

 

 

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admisión en el reino. Ambos, aquellos que deben ser cercados o llevados con una soga o metidos en un club como si fuera el Reino, y aquellos que edifican la cerca, tiran la soga o tienen el club encontrarán la puerta cerrada y oirán al Maestro decir: “Apartaos de mi; nunca os conocí”. Los ministros no son llamados para ser capataces, ni para ser la conciencia de otros. Ellos son llamados para ser maestros de la Verdad.

 

Si la iglesia no progresa en la Verdad, y si periódicamente no añade conocimiento a conocimiento, entonces incuestionablemente estoy seguro, que no tiene nada de que jactarse. Ella está inactiva. La línea de comunicación entre la iglesia y Dios esta rota. Dios la abandonó absolutamente. Y ella no puede dar a sus miembros “alimento a su debido tiempo” que viene del trono de Dios.

 

Tomemos por ejemplo la religión como esta hoy día en la Biblia. No vino toda a un mismo tiempo. Más bien, necesitó como cuatro mil años para acumular, y cerca de dos mil años más para comprender tanto como la iglesia ha comprendido hasta hoy.

 

Si comparamos el conocimiento que Abel tenía de la religión con el conocimiento que los Cristianos tienen hoy de ella, sin duda descubriríamos que no hay ninguna comparación, porque Abel comparativamente solamente sabía el principio de la fe de los Cristianos. Así pues, si la religión no es algo que vive y crece y progresa, ¿qué entonces?

 

La religión de Abel de hace seis mil años ha estado avanzando y extendiéndose para satisfacer las necesidades del pueblo de hoy día, esto fue realizado solamente añadiendo la inspiración a ésta y desarrollándose así misma. Si la religión no está creciendo y progresando, entonces ¿cómo puede ser  una iglesia viviente? Y ¿cómo puede mantenerse

 

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con las señales de los tiempos, y con el progreso del santuario en lo alto?

 

Leamos:

 

Efesios 4:11-14 – “Y él mismo constituyó a unos, apóstoles; a otros, profetas; a otros, evangelistas; a otros, pastores y maestros, a fin de perfeccionar a los santos para la obra del ministerio, para la edificación del cuerpo de Cristo, hasta que todos lleguemos a la unidad de la fe y del conocimiento del Hijo de Dios, a un varón perfecto, a la medida de la estatura de la plenitud de Cristo; para que ya no seamos niños fluctuantes, llevados por doquiera de todo viento de doctrina, por estratagema de hombres que para engañar emplean con astucia las artimañas del error”.

 

La Inspiración hace claro aquí que el plan de Dios es de que la iglesia continúe creciendo en ambos conocimientos y perfección hasta que todos vengamos a la unidad de la fe y al conocimiento del Hijo de Dios, a ser un varón perfecto, a la medida de la edad y plenitud de Cristo; para que no seamos más como niños, fluctuantes y llevados por doquiera por todo viento de doctrina, por estratagema de hombres que para engañar, emplean con astucia los artificios del error.

 

Desde que la iglesia no ha llegado a esta norma establecida por los versículos de esta escritura, es obvio entonces que necesita tener el más grande conocimiento de la religión de la Biblia del que tiene en la actualidad.

 

Estando lejos de haber alcanzado tal unidad de fe, conocimiento, y perfección, podemos ver la necesidad tan clara como el cristal: De que nosotros como Cristianos necesitamos comenzar a crecer, de otra manera el tiempo de tal crecimiento pasará y quedaremos enanos, sin haber avanzado lo

 

 

 

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suficiente para ser elegibles para poseer un hogar en el Reino. Entonces sucederá que todos los Cristianos que no alcanzaron su madurez lamentarán en alto, “Pasó la siega, terminó el verano, y nosotros no hemos sido salvos”. Jeremías 8:20.

 

Ya veis vosotros que el conocimiento de la Biblia, es el medio del Cielo para la salvación y la eternidad, más los medios del hombre son de guardarlos en ignorancia de lo que se enseña fuera de su propio circulo para que puedan tener a los hombres bajo su control.

 

Para que podamos ver más allá que la Verdad está creciendo, y que nosotros deberíamos ir a la par de ella, leamos:

 

Apocalipsis 14:6-10 – “Vi volar por en medio del cielo a otro ángel, que tenía el evangelio eterno para predicarlo a los moradores de la tierra, a toda nación, tribu, lengua y pueblo, diciendo a gran voz: Temed a Dios, y dadle gloria, porque la hora de su juicio ha llegado; y adorad a aquel que hizo el cielo y la tierra, el mar y las fuentes de las aguas. Otro ángel le siguió, diciendo: Ha caído, ha caído Babilonia, la gran ciudad, porque ha hecho beber a todas las naciones del vino del furor de su fornicación. Y el tercer ángel los siguió, diciendo a gran voz: Si alguno adora a la bestia y a su imagen, y recibe la marca en su frente o en su mano, él también beberá del vino de la ira de Dios, que ha sido vaciado puro en el cáliz de su ira; y será atormentado con fuego y azufre delante de los santos ángeles y del Cordero".

 

Aquí están representados tres mensajes, uno después del otro. A menos que nosotros nos guardemos a la par de cada uno de ellos progresivamente, nos encontraremos atrasados en  el tiempo, como están los Judíos de hoy.

 

 

 

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Los que dejan de guardar su paso a la par de la Verdad como la Inspiración lo declara, por supuesto que nunca pueden llegar a la “unidad de la fe”, y a un pleno “conocimiento del Hijo de Dios, a un varón perfecto, a la medida de la estatura de la plenitud de Cristo; para que ya no seamos niños fluctuantes, llevados por doquiera de todo viento de doctrina, por estratagema de hombres …” Efesios 4:13, 14.

 

Claro es entonces, que la religión en si, misma es algo viviente y progresiva, más lo trágico es que no todos se están manteniendo a la par con ella.

 

Consideremos este asunto vital, más concretamente. Vosotros sabéis que la Verdad continuó desarrollándose y creciendo aún después de la muerte de Moisés. Sin embargo, los Judíos mataron a los profetas, y no avanzaron más allá de donde Moisés los dejó. En efecto, ellos retrocedieron Así es que ellos se encuentran en donde hoy están porque fallaron en cambiar de ruta aun cuando se les enviaron profeta tras profeta para guardarlos de la caída al abismo en el cual estaban precipitándose. Aún Cristo Mismo falló en despertarles para que vieran lo espantoso de su situación. Comparativamente muy pocos, vieron la luz roja del peligro, y se convirtieron al Señor.

 

Estas infidelidades y apostasías nunca terminaron. Han continuado avanzando hasta este mismo día. Aún la misma primitiva iglesia Cristiana cayó eventualmente dormida trayendo con esto las edades oscuras de la religión. Y como la Inspiración pusiera la brillante luz de la verdad en la mano de la Reforma durante la hora más tenebrosa de aquel día, la iglesia casi en su totalidad falló en ver la luz, y falló en sentir la necesidad de una reforma. La madre iglesia, más bien que venir a la luz, hizo todo lo que pudo por extinguirla. Sin embargo, los electos, salieron de las tinieblas para venir

 

 

 

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a la luz. Así fue como otra secta, la denominación Luterana fue organizada.

 

Pero esto fue solamente el principio de la Reforma. Como empezaron a desarrollarse una verdad después de otra, cada una impelió el principio de una nueva denominación porque cada una de las hijas mayores (sectas), siguiendo los pasos de la madre, rehusaban ellas mismas mantenerse a la par con el mensaje. Sin duda que la misma denominación Luterana, como las otras antes o después de ella, estaba satisfecha con permanecer donde Lutero la había dejado. Y de esta manera la necesidad de otra denominación, la presbiteriana, vino a existencia. Así durante la corriente de los tiempos una denominación después de otra han hecho lo mismo.

 

De esta manera es como ha sucedido durante todas las centurias. Por esto es que ninguna de las iglesias ha ascendido más alto de lo que los fundadores las dejaron. Por esto es que los Cristianos, más bien que crecer en la unidad de la fe han venido a ser con cada día que pasa más desunidos y hostiles.

 

Por tanto, presumir que la denominación de uno nunca ha añadido o quitado doctrina es admitir que la iglesia está en completo reposo. Virtualmente están diciendo, “No tenemos necesidad de nada”, cuando es un hecho que ellos son “cuitados, miserables, pobres, ciegos, y desnudos”, pero no lo conocen.

 

Es obvio, que la religión es algo que crece y se desarrolla, pero este pueblo como una organización nunca se ha mantenido a la par con la verdad.

 

Pero la parte más descollante es que los que han guiado la denominación después de la muerte de sus fundadores, más bien que enseñar a los seglares a que velen y

 

 

 

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esperen por más Verdad revelada, en vez de esto enseñan que su iglesia tiene toda la Verdad y que no necesitan más.

 

En todo esto nosotros podemos ver que la “iglesia militante” es en realidad la iglesia que está luchando en contra de la Verdad, y que la “iglesia triunfante” es la iglesia que marcha hacia adelante con el progreso de la Verdad.

 

Este hecho se mostró a la vista desde los primeros pasos de la religión hacia el progreso: Caín y Abel, ambos estaban tratando de avanzar por el camino real del progreso en cada una ofreciendo un sacrificio. Abel adoraba de acuerdo con la sabiduría de Dios, mientras que Caín adoraba de acuerdo con la sabiduría del hombre, el sacrificio de Caín era seriamente una falsificación del sacrificio de Abel. Por esto vemos aquí que donde está la Verdad también está la falsedad. Mientras que haya denominaciones establecidas en la Verdad tiene que haber también falsificaciones de ellas, y esta es la razón de la multiplicación de las denominaciones y sectas.

 

El que Caín matara a Abel porque este hizo lo que Dios mandó que hiciera, es un tipo de la falsa adoración de oposición y de persecución. Así fue en el pasado y así será. Los que están en el error siempre se encuentran hostiles en contra de la Verdad y persiguen a aquellos que practican la Verdad..

 

Supongamos ahora que Abel hubiera vivido hasta nuestros días y que hubiera seguido el progreso de la Verdad a través de cada generación ¿Cuál hubiera sido su experiencia en la religión? Necesariamente él se habría unido al movimiento de Enoc; al de Noé; al de Abraham, al de Jacob, al de Moisés; al de todos los profetas; al de Juan el Bautista; al de los Apóstoles; entonces al de los Luteranos; al de los Presbiterianos; al de los Metodistas; al de los Adventistas del primer día; al de los

 

 

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Adventistas del Séptimo Día; y al fin y con seguridad a los Davidianos Adventistas del Séptimo Día a fin de mantenerse avanzando con la Verdad, Abel habría tenido que dejar un movimiento para unirse con el otro a cada nuevo desenvolvimiento de la Verdad, de otra manera él habría permanecido tan ignorante como los Judíos en el progreso de la religión.

 

Nosotros vemos ahora tan claro como la Verdad misma, que la iglesia triunfante a través de las edades fue y es aún formada de los miembros de la iglesia que escalan los peldaños de la Verdad hasta este día.

 

Ezequiel 36:23, 24 – “Y santificaré mi grande nombre, profanado entre las naciones, el cual profanasteis vosotros en medio de ellas; y sabrán las naciones que yo soy Jehová, dice Jehová el Señor, cuando sea santificado en vosotros delante de sus ojos. Y yo os tomaré de las naciones, y os recogeré de todas las tierras, y os traeré a vuestro país”.

 

Aquí está otra vez reiterada la Verdad; los que están determinados a permanecer abajo en el primer peldaño de la escala de la Verdad, serán dejados a quedar allí para siempre. Más los que se mantienen a la par de la verdad serán traídos a su propia tierra, sin tener que sentarse otra vez en las bancas con los Laodicenses y sin tener que cruzar por más tiempo por las tierras de los Gentiles.

 

Ezequiel 36:25 – “Esparciré sobre vosotros agua limpia, y seréis limpiados de todas vuestras inmundicias; y de todos vuestros ídolos os limpiaré”.

 

Como veis vosotros, esta final y completa purificación se obtiene solamente después que la Iglesia triunfante se mueva a

 

 

 

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la Tierra Prometida. Los que dejen de mantenerse a la par de la Verdad y que elijan quedarse con sus ídolos, de cualquier manera tendrán la oportunidad de cumplir sus deseos personales, porque “se meterán en las cavernas de las peñas y en las aberturas de la tierra, por la presencia temible de Jehová, y por el resplandor de su majestad, cuando él se levante para castigar la tierra”. Isaías 2:19.

 

Ezequiel 36:26 – “Os daré corazón nuevo, y pondré espíritu nuevo dentro de vosotros; y quitaré de vuestra carne el corazón de piedra, y os daré un corazón de carne”.

 

Cuando esta limpieza tenga lugar, entonces será dado un nuevo corazón y un nuevo espíritu a todos los que anhelen crecer en el conocimiento de Dios, y los que entonces se encuentren en el Reino. Después que tenga lugar este cambio en el corazón, será la cosa más natural cumplir la voluntad de Dios. Nunca más habrá lucha en contra del corazón carnal.

 

Ezequiel 36:27-29 – “Y pondré dentro de vosotros mi Espíritu, y haré que andéis en mis estatutos, y guardéis mis preceptos, y los pongáis por obra. Habitaréis en la tierra que di a vuestros padres, y vosotros me seréis por pueblo, y yo seré a vosotros por Dios. Y os guardaré de todas vuestras inmundicias; y llamaré al trigo, y lo multiplicaré, y no os daré hambre”.

 

Daniel 12:1 – “En aquel tiempo se levantará Miguel, el gran príncipe que está de parte de los hijos de tu pueblo; y será tiempo de angustia, cual nunca fue desde que hubo gente hasta entonces; pero en aquel tiempo será libertado tu pueblo, todos los que se hallen escritos en el libro”.

 

 

 

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He aquí el mundo esta ya encaminándose al tiempo de tribulación. Y cuando ésta sea llegada, el refugio será encontrado sólo en la Verdad actual, La Verdad que pone el nombre de uno en el libro del cielo de Miguel.

 

Daniel 12:10 – “Muchos serán limpios, y emblanquecidos y purificados; los impíos procederán impíamente, y ninguno de los impíos entenderá, pero los entendidos comprenderán”.

 

¿Quiénes son los entendidos? Ellos deben ser los que siempre están en busca del “aceite de oro”, los que tienen aceite extra en sus vasos (Mateo 25:1-13). Aquellos a quienes se les deja entrar por la puerta son aquellos que han prevalecido y seguido la ruta trazada en el mapa de la Verdad Presente.

 

Religión, Hermano, Hermana, no es una cosa muerta y decadente, sino que es algo que vive y crece, y el pueblo de Dios crece con ella.

 

Y ahora para terminar yo deseo hacer esta pregunta para vuestra consideración y para que la contestéis a vosotros mismos: ¿Es esta experiencia - la experiencia de progresar con la Verdad - vuestra experiencia? Si no es ¿entonces por qué no? Si, es ¿por qué? ¿No es esto digno de cualquier cosa – dinero, casas, tierras, amigos, madres, padres, esposos o esposas? ¿No es esto digno a fin de ser multiplicado? (Véase Isaías 61:6, 7; Marcos 10:28-31).

 

 

 

 

 

 

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MEDITACIÓN PARA LA ORACIÓN DE APERTURA

Trayendo Nuevas Verdades

 

Daré lectura de “Palabras de Vida del Gran Maestro”, página 10, comenzando en el cuarto párrafo –

 

“En la primera parte de su ministerio, Cristo había hablado a la gente en palabras tan claras, que todos sus oyentes podían haber entendido las verdades que los hubieran hecho sabios para la salvación. Pero en muchos corazones la verdad no había echado raíces y había sido prestamente arrancada. 'Por eso les hablo en parábolas -dijo él-, porque viendo no ven, y oyendo no oyen, ni entienden' … Jesús quiso incitar el espíritu de investigación. Trató de despertar a los descuidados, e imprimir la verdad en el corazón”.

 

En los días de Cristo era difícil traer nuevas verdades al pueblo como también es hoy. Jesús usó todos los medios posibles para interesar al pueblo en la Verdad Presente en su día, pero sabía cuán pequeños logros él tenía – así un poco del pueblo común. Los así llamados aprendices del día en que amargamente se opusieron a él y esperaban  sus momentos y los medios para acusarlo falsamente de cualquier cosa, entonces de otra. En la clase de mundo en que vivimos no podemos esperar que el pueblo sea diferente hoy de lo que fue en su día. Oremos por lo tanto para que nos mantengamos despiertos, para que continuemos siendo o estando más descontentos con nuestros logros como el día que pasa, no sea que también nos encontremos faltos hasta el laodiceanismo. Oremos para que nuestros corazones estén siempre abiertos a su desarrollada verdad, y que nunca perdamos el hambre por el “alimento a tiempo”.

 

 

 

 

 

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 CINCO HOMBRES QUE MATAN DESPUÉS QUE OTRO PONE UNA SEÑAL

 

TEXTO DE LA ALOCUCIÓN POR V. T. HOUTEFF

MINISTRO DE LOS DAVIDIANOS ADVENTISTAS DEL SÉPTIMO DÍA

EL SÁBADO, 2 DE AGOSTO DE 1947

CAPILLA DEL MONTE CARMELO

WACO, TEXAS

 

El asunto de nuestro estudio en esta tarde se encuentra en el noveno capítulo de Ezequiel. Comencemos con -

 

Ezequiel 9:1-6 – “Clamó en mis oídos con gran voz, diciendo: Los verdugos de la ciudad han llegado, y cada uno trae en su mano su instrumento para destruir. Y he aquí que seis varones venían del camino de la puerta de arriba que mira hacia el norte, y cada uno traía en su mano su instrumento para destruir. Y entre ellos había un varón vestido de lino, el cual traía a su cintura un tintero de escribano; y entrados, se pararon junto al altar de bronce. Y la gloria del Dios de Israel se elevó de encima del querubín, sobre el cual había estado, al umbral de la casa; y llamó Jehová al varón vestido de lino, que tenía a su cintura el tintero de escribano, y le dijo Jehová: Pasa por en medio de la ciudad, por en medio de Jerusalén, y ponles una señal en la frente a los hombres que gimen y que claman a causa de todas las abominaciones que se hacen en medio de ella. Y a los otros dijo, oyéndolo yo: Pasad por la ciudad en pos de él, y matad; no perdone vuestro ojo, ni tengáis misericordia. Matad a viejos, jóvenes y vírgenes, niños y mujeres, hasta que no quede ninguno; pero a todo aquel sobre el cual hubiere señal, no os acercaréis; y comenzaréis por mi santuario. Comenzaron, pues, desde los varones ancianos que

 

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estaban delante del templo”.

Notad que el mandato del Señor, los ángeles están a cargo de los pecadores de Jerusalén (la iglesia) no el mundo. Son dejados solamente los que aborrecen las abominaciones, aquellos que reciben la marca por gemir y clamar en contra de los errores, son dejados.

 

El día que Ezequiel tuvo la visión en Babilonia, Jerusalén había estado en cautividad y sin su pueblo por años. Ver Ezequiel 1:1, 8:7. Ninguna purificación o limpieza aquí descrita, nunca tuvo lugar en los días de Ezequiel o en los anales de la iglesia desde su día. Por lo tanto es cierto que la profecía está aún por cumplirse.

 

La inspiración en nuestros días pone esta predicción de purificación aún en el futuro y hace esta explicación:

 

“Los que no sienten pesar por su propia decadencia espiritual ni lloran sobre los pecados ajenos quedarán sin el sello de Dios. El Señor ordena a sus mensajeros, los hombres que tienen las armas de matanza en la mano: ‘Pasad por la ciudad en pos de él, y herid; no perdone vuestro ojo, ni tengáis misericordia. Matad viejos, mozos y vírgenes, niños y mujeres, hasta que no quede ninguno: mas a todo aquel sobre el cual hubiere señal, no llegaréis; y habéis de comenzar desde mi santuario. Comenzaron pues desde los varones ancianos que estaban delante del templo’.

 

“Aquí vemos que la iglesia, el santuario del Señor, era la primera en sentir los golpes de la ira de Dios. Los ancianos, aquellos a quienes Dios había brindado gran luz, que se habían destacado como guardianes de los intereses espirituales del pueblo, habían

 

 

 

 

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traicionado su cometido”. - “Testimonios para la Iglesia”, Volumen 5, página 196.

 

Los enemigos de Dios, han tomado posición de las iglesias, es verdad, pero pronto los papeles serán cambiados, y los siervos del diablo no parecerán más; caerán y no serán hallados.

 

Note que el pueblo está engañado por los ancianos que han traicionado su confianza. Vosotros sabéis que los profetas, apóstoles, Jesucristo, y los reformadores, en su tiempo todos fueron injuriados, vituperados como impostores y “Retoños” pero nosotros damos gracias a Dios de que estos “retoños” y la Verdad, no los difuntos admirables triunfarán.

 

“… habían [los ancianos] asumido la actitud de que no necesitamos esperar milagros ni la señalada manifestación del poder de Dios como en tiempos anteriores”. “Testimonios para la Iglesia”, Volumen 5, página 196.

 

¿No es esta hoy la posición de los ancianos? ¿No están ellos clamando paz y seguridad? ¿No están ellos predicando que Ezequiel nueve no tendrá su cumplimiento en la iglesia, y que este mensajes es una falsa alarma? ¿Qué personas tienen que despertar de su sueño? Ellos están soñando porque:

 

“Los tiempos han cambiado. Estas palabras fortalecen su incredulidad, y dicen: El Señor no hará bien ni mal. Es demasiado misericordioso para castigar a su pueblo”.

 

Por supuesto que la iglesia es su objeto más preciado en la tierra, y esta es justamente la razón porque El tiene que purificarla, y es por esto que El tiene que matar a los impíos  que se encuentran en medio de ella

 

 

 

 

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y sellar (preservar) al penitente para que Él pueda tener una iglesia limpia, “que no tuviese mancha ni arruga ni cosa semejante”. Efesios 5:27.

 

“Así el clamor de paz y seguridad es dado por hombres que no volverán a elevar la voz como trompeta para mostrar al pueblo de Dios sus transgresiones y a la casa de Jacob sus pecados. Estos perros mudos que no querían ladrar, son los que sienten la justa venganza de un Dios ofendido. Hombres, jóvenes y niñitos, todos perecen juntos”. “Testimonios para la Iglesia”, Volumen 5, página 196.

 

Continuando más allá, el Espíritu de Dios dice:

 

“¿Quiénes siguen el consejo de Dios en este tiempo? ¿Son los que excusan virtualmente los yerros de entre el profeso pueblo de Dios, y quienes murmuran en su corazón, si no abiertamente, contra los que quisieran reprender el pecado? ¿Son aquellos que se les oponen y simpatizan con los que contemporizan con el mal? No, en verdad. A menos que se arrepientan, y dejen la obra satánica de oprimir a los que tienen la preocupación de la obra, y de dar la mano a los pecadores de Sion, nunca recibirán el sello de la aprobación de Dios. Caerán en la destrucción general de los impíos, representada por la obra de los hombres que llevaban armas. Nótese esto con cuidado: Los que reciban la marca pura de la verdad, desarrollada en ellos por el poder del Espíritu Santo y representada por el sello del hombre vestido de lino, son los que ‘gimen y que claman a causa de todas las abominaciones que se hacen’ en la iglesia. Su amor por la pureza y el honor y la gloria de Dios es tal, y tienen una visión tan clara del carácter excesivamente pecaminoso del pecado, que se los representa agonizando, suspirando y llorando. Léase el capítulo noveno de Ezequiel”. Entonces dice el Espíritu:

 

“Pero la matanza general de todos los que no

 

 

 

 

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ven así el amplio contraste entre el pecado y la justicia, y no tienen los sentimientos de aquellos que siguen el consejo de Dios y reciben la señal, está descrita en la orden dada a los cinco hombres con armas: ‘Pasad por la ciudad en pos de él, y herid; no perdone vuestro ojo, ni tengáis misericordia. Matad viejos, mozos y vírgenes, niños y mujeres, hasta que no quede ninguno: mas a todo aquel sobre el cual hubiere señal, no llegaréis; y habéis de comenzar desde mi santuario’”. “Joyas de los Testimonios”, Tomo 1, páginas 335-336; “Testimonios para la Iglesia”, Volumen 3, página 267.

 

Aquí se muestran dos clases en la iglesia los fieles y los infieles, los que miran el pecado como pecado y los que lo miran como una diversión. También se manifiesta aquí que la iglesia tiene una obra final que cumplir, una obra que debe ser hecha por ella especialmente y no por el mundo. Y en adición a esto es visto que esta obra final de la iglesia es el sellamiento de los 144.000. Estos son los que lamentarán más profundamente los errores entre el pueblo profeso de Dios.

 

Ezequiel 9:7-11 – “Y les dijo: Contaminad la casa, y llenad los atrios de muertos; salid. Y salieron, y mataron en la ciudad. Aconteció que cuando ellos iban matando y quedé yo solo, me postré sobre mi rostro, y clamé y dije: ¡Ah, Señor Jehová! ¿destruirás a todo el remanente de Israel derramando tu furor sobre Jerusalén? Y me dijo: La maldad de la casa de Israel y de Judá es grande sobremanera, pues la tierra está llena de sangre, y la ciudad está llena de perversidad; porque han dicho: Ha abandonado Jehová la tierra, y Jehová no ve. Así, pues, haré yo; mi ojo no perdonará, ni tendré misericordia; haré recaer el camino de ellos sobre sus propias cabezas. Y he aquí que el varón vestido de lino, que tenía el tintero a su cintura, respondió una palabra, diciendo: He hecho conforme a todo lo que me mandaste”.

 

 

 

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¿Cuándo tendrá lugar esta separación de los impíos de entre los justos? Jesús la señala en el fin del mundo. El dice:

 

“Dejad crecer juntamente lo uno y lo otro hasta la siega; y al tiempo de la siega yo diré a los segadores: Recoged primero la cizaña, y atadla en manojos para quemarla; pero recoged el trigo en mi granero. Asimismo el reino de los cielos es semejante a una red, que echada en el mar, recoge de toda clase de peces; y una vez llena, la sacan a la orilla; y sentados, recogen lo bueno en cestas, y lo malo echan fuera”. Mateo 13:30, 47, 48.

 

La cizaña es quemada; como el pez malo, es echado fuera. Esta es la manera en que el Reino tiene que venir, dice el Señor. ¿Y qué es la cosecha si no es el Juicio de los Vivos? - la obra que separa lo uno de lo otro.

 

“El verdadero pueblo de Dios”, dice la Inspiración, “que toma a pecho el espíritu de la obra del Señor y la salvación de las almas, verá siempre al pecado en su verdadero carácter pecaminoso. Estará siempre de parte de los que denuncian claramente los pecados que tan fácilmente asedian a los hijos de Dios. Especialmente en la obra final que se hace en favor de la iglesia, en el tiempo del sellamiento de los ciento cuarenta y cuatro mil que han de subsistir sin defecto delante del trono de Dios, sentirán muy profundamente los yerros de los que profesan ser hijos de Dios. Esto lo expone con mucho vigor la ilustración que presenta el profeta acerca de la última obra, bajo la figura de los hombres que tenían sendas armas destructoras en las manos”. “Joyas de los Testimonios”, Tomo 1, página 335; “Testimonios para la Iglesia”, Volumen 3, página 267. ¿De qué lado estás tú?

 

El asunto de los 144.000 se manifiesta ahora mucho más luminoso que nunca antes. Ahora vosotros podéis ver más claramente que aquellos

 

 

 

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quienes escapan de la matanza predicha de Ezequiel nueve, son los 144.000, los futuros siervos de Dios, los primeros frutos de la siega, resultando de la purificación del santuario (iglesia), la obra del juicio investigador de los vivientes. Esta obra y esta Verdad, son por consiguiente, las más importantes de hoy día, y deberían ser oídas sinceramente si es que nosotros queremos recibir la marca y el sello y escapar de la matanza, sobreviviendo al día grande y terrible del Señor. Nuestra negligencia en gemir y clamar por las abominaciones en la iglesia significaría nuestra perdición eterna. Nosotros no debemos permitir que ninguna cosa ni nadie distraiga nuestra atención de esta grande y gloriosa obra para los santos, pero ignominiosa para los pecadores. Esta obra “debiera absorber completamente la mente y la atención” - “Primeros Escritos”, página 118.

 

Nada se permitirá que interfiera con tu felicidad eterna. No, no por un momento, porque el día está pasando. ¿Qué, esposos, amigos, compañeros, lo perderás contigo mismo si esta verdad falla para convencerte a ti y a ellos?. Pero la promesa para los fieles es: 

 

“En lugar de vuestra doble confusión y de vuestra deshonra, os alabarán en sus heredades; por lo cual en sus tierras poseerán doble honra, y tendrán perpetuo gozo”. Isaías 61:7.

 

Hermano, Hermana, ¿actualmente comprendes, actualmente te das cuenta la crisis de la obra descrita aquí? ¿Podéis percibir la predicción de que el mensaje del sellamiento tiene que ser rechazado por los que fomentan las abominaciones? ¿Está usted con ellos? Yo espero que no. Está aquí entonces alguna pregunta que si el hermano se deja en ignorancia de esta obra de limpieza, que Dios está por realizar entre su pueblo, yo digo ¿Si ellos son dejados en ignorancia, ellos no caerán en la destrucción general de los impíos representada por la obra de los cinco hombres que llevan los instrumentos de destrucción”?.

 

Es obvio que todos los pecadores en la iglesia perecerán

 

 

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en esta matanza de los impíos, ya sean hombres, mujeres, o niños. Así los padres que continúen al servicio del diablo tendrán Juntamente con ellos a sus niños en el abismo; y los padres que venzan la oposición tendrán con ellos a sus hijos en el Reino. ¿Dónde os encontráis vosotros hoy? ¿Estáis con los que sienten el peso de esta obra, o estáis en contra de ellos? Veamos que es una hora decisiva para usted y  para mi.

 

“Nótese esto con cuidado”, aconseja el Espíritu de Dios: “Los que reciban la marca pura de la verdad, desarrollada en ellos por el poder del Espíritu Santo y representada por el sello del hombre vestido de lino, son los que ‘gimen y que claman a causa de todas las abominaciones que se hacen’ en la iglesia. Su amor por la pureza y el honor y la gloria de Dios es tal, y tienen una visión tan clara del carácter excesivamente pecaminoso del pecado, que se los representa agonizando, suspirando y llorando. Léase el capítulo noveno de Ezequiel”. “Joyas de los Testimonios”, Tomo 1, página 336; “Testimonios para la Iglesia”, Volumen 3, página 267.

 

¿Quiénes son los verdaderos Adventistas del Séptimo Día en este momento decisivo? ¿Aquellos que resisten la obra final para la iglesia? ¿Los que están rechazando el mensaje del sellamiento? ¿O los que tienen puestos en él sus corazones y sus almas? No seamos por más tiempo tibios en nuestros esfuerzos. Hagamos frente a la situación de una manera honesta y sincera. Unjamos nuestros ojos con este colirio celestial para que podamos ver y saber los que es Verdad. Solamente los que se arrepienten, y los que promueven el mensaje de la hora más bien que pelear en contra de él, estarán con el Cordero en el Monte de Sion.

 

Permitid que lea nuevamente:

 

“En el tiempo en que su ira se manifieste con castigos, estos humildes y consagrados discípulos de Cristo se distinguirán del resto del mundo por la angustia de su alma, expresada en lamentaciones y

 

 

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lloros, reproches y amonestaciones. Mientras que otros procuran arrojar un manto sobre el mal existente, y excusar la gran impiedad que prevalece por doquiera, los que tienen celo por el honor de Jehová y amor por las almas no callarán para obtener el favor humano. Sus almas justas se afligen día tras día por las obras y conversaciones profanas de los impíos. Son impotentes para detener el torrente de la iniquidad; de ahí que se llenen de pesar y alarma. Lloran delante de Dios al ver la religión despreciada en los mismos hogares de aquellos que han tenido gran luz. Se lamentan y afligen sus almas porque en la iglesia hay orgullo, avaricia, egoísmo y engaño de casi toda clase. El Espíritu de Dios, que inspira la reprensión, es pisoteado, mientras triunfan los siervos de Satanás…”. “Testimonios para la Iglesia”, Volumen 5, páginas 195-196.

 

No sirváis por más tiempo a Satanás. No combatáis a Dios en contra de vuestro propio interés. En estas líneas el Espíritu de Profecía ha dicho tan claro como puede decirse, que cuando el mensaje del sellamiento sea traído a la atención de del pueblo, los siervos del Diablo triunfarán temporalmente, mientras que los siervos de Dios y Su Verdad por un tiempo serán hollados bajo las plantas de los pies, por aquellos que controlan las iglesias. Así es que vosotros estáis advertidos de que esta mala obra está en progreso actualmente; los hermanos ministros ya están peleando el mensaje en lugar de enseñarlo. Los púlpitos son ocupados por hombres que Sábado tras Sábado dirigen ataque tras ataque en contra de es esta Verdad, la verdad del Juicio para los Vivos.

 

Como al profeta del evangelio en el capítulo 66 le fue dada luz acerca de este asunto, iremos nosotros a él.

 

Isaías 66:15-17, -19 – “Porque he aquí que Jehová vendrá con fuego, y sus carros como torbellino, para descargar su ira con furor, y su reprensión con llama de

 

 

 

 

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fuego. Porque Jehová juzgará con fuego y con su espada a todo hombre; y los muertos de Jehová serán multiplicados. Los que se santifican y los que se purifican en los huertos [en lugares de adoración], unos tras otros [siguiendo al dirigente], los que comen carne de cerdo y abominación y ratón, juntamente serán talados, dice Jehová … Y pondré entre ellos señal, y enviaré de los escapados de ellos a las naciones, a Tarsis, a Fut y Lud que disparan arco, a Tubal y a Javán, a las costas lejanas que no oyeron de mí, ni vieron mi gloria; y publicarán mi gloria entre las naciones”.

 

Otra vez es indicado aquí que la matanza tiene lugar en la iglesia, entre aquellos que están bien enterados en las cosas de Dios, así que aquellos que escapan son enviados a declarar su gloria y su fama entre los gentiles. Además, el mismo hecho de que los gentiles no son matados, sino que son enseñados de Dios después que la matanza tuvo lugar, manifiesta concretamente que la matanza tiene lugar en la iglesia únicamente, y antes que termine el tiempo de prueba para los Gentiles. Para repetir los que escapen de la matanza son enviados a predicar a los Gentiles.

 

Isaías 66:20 – “Y traerán [los escapados, dice la escritura] a todos vuestros hermanos de entre todas las naciones, por ofrenda a Jehová, en caballos, en carros, en literas, en mulos y en camellos, a mi santo monte de Jerusalén, dice Jehová, al modo que los hijos de Israel traen la ofrenda en utensilios limpios a la casa de Jehová”.

 

Desde que los 144.000 son los primeros frutos, y también los siervos de Dios, y son de ambas casas antitípicas de Judá e Israel, ellos deben ser los escapados y

 

 

 

 

 

 

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los enviados. Aquellos quienes ellos traigan a la casa del Señor de todas las naciones (Apocalipsis 7:9) por consiguiente, deben ser los segundos frutos. Los primeros son los frutos de la iglesia, y los últimos son los frutos de los Gentiles (Véase Apocalipsis 7:2-9).

 

A fin de hacer callar la verdad, los ancianos en su impiedad e ignorancia ahora enseñan a los laicos que el tema de los 144.000 es una cuestión discutida en vez de una verdad revelada.

 

El diablo tendrá esto para que el pueblo pueda caer bajo las armas de matanza de los ángeles ¡Que insensatez! Y ¡Que capacidad tiene el diablo sobre los hombres que controlan las iglesias! ¿No son engañados los mismos elegidos, los 144.000? Este es verdaderamente el tiempo “para que vengas a la ayuda del Señor en contra del violento, si tú recibes la marca de la aprobación de Dios, y si escapas de las armas de matanza de los ángeles, si tú eres dejado”. Si, tú eres del remanente.

 

Nunca ha habido un esfuerzo tan grande en ninguna otra edad, para despertar al pueblo, como el esfuerzo que hoy día. Si, cientos y miles, y millones de libros han sido repartidos entre toda la denominación. Esto se ha estado haciendo por más de una década. Verdaderamente que por esto aún se puede decir de la iglesia:

 

“Ay de ti, Corazín! Ay de ti, Betsaida! Porque si en Tiro y en Sidón se hubieran hecho los milagros que han sido hechos en vosotras, tiempo ha que se hubieran arrepentido en cilicio y en ceniza. Por tanto os digo que en el día del juicio, será más tolerable el castigo para Tiro y para Sidón, que para vosotras. Y tú, Capernaum, que eres levantada hasta el cielo, hasta el Hades serás abatida; porque si en Sodoma se hubieran hecho los milagros que han sido hechos en ti, habría permanecido hasta el día de hoy. Por tanto os digo

 

 

 

 

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que en el día del juicio, será más tolerable el castigo para la tierra de Sodoma, que para ti”. Mateo 11:21-24.

 

Podéis ver vosotros que el diablo hoy, tiene al pueblo sumido más profundamente en el abismo de lo que lo tenía en los días de Cristo o en los días de Lutero. Y por esto, la victoria del Señor y la victoria de aquellos que escapan del abismo, será mucho más gloriosa. “Y les llamarán Pueblo Santo, Redimidos de Jehová; y a ti te llamarán Ciudad Deseada, no desamparada”. Isaías 62:12.

 

“He aquí sobre los montes los pies del que trae buenas nuevas, del que anuncia la paz. Celebra, oh Judá, tus fiestas, cumple tus votos; porque nunca más volverá a pasar por ti el malvado; pereció del todo”. Nahum 1:15.

 

Los impíos en la iglesia, se nota, tienen que venir finalmente a su fin. ¿Con cuál compañía estará usted? ¿Con aquellos que cierran sus ojos a esta Verdad? ¿o con los que esfuerzan traerlo al frente? Juzgue su propio caso

 

 

 

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